Más de 300 irresponsables organizan una macrofiesta en el campo

Agentes de la Guardia Civil desalojaron en la noche del sábado a los más de 300 jóvenes que asistían a una macrofiesta en mitad del campo, en una finca situada entre Campo de Criptana (Ciudad Real) y Miguel Esteban (Toledo).

La Guardia Civil fue alertada de que cientos de jóvenes se habían dado cita en el paraje conocido como «Senda de los Cantareros», famosa por sus petroglifos celtíberos. Los asistentes a la fiesta –algunos habían desplegado tiendas de campaña- habían acudido en turismos, furgonetas y autocaravanas no sólo desde las provincias de Ciudad Real y Toledo sino desde otros puntos de España como la Comunidad Valenciana, Andalucía, Comunidad de Madrid y Galicia.

Según averiguó la Guardia Civil, lo que en principio había sido una celebración de cumpleaños que había organizado un joven residente en la provincia de Toledo habría derivado en una macrofiesta a través de una convocatoria lanzada en las redes sociales. Los agentes que se habían desplazado hasta este paraje tuvieron que pedir refuerzos a varios acuartelamientos de la Guardia Civil de la comarca para desalojar a todos los jóvenes ya que estaban incumpliendo normas sanitarias básicas para frenar la pandemia como no respetar la distancia mínima interpersonal o no llevar puesta la mascarilla higiénica.

Lo sucedido en esta finca ha causado gran indignación en esta comarca manchega ya que la localidad de Miguel Esteban aún presenta una alta incidencia acumulada de contagios: 250 casos por cada 100.000 habitantes en los últimos 14 días. En mejor situación se encuentra Campo de Criptana con una incidencia acumulada de 30 casos.

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