La selección azzurra acabó con el sueño español

La Eurocopa sigue deshojando la margarita. En fase de semifinales no hay lugar para el lamento y los tropiezos te envían a casa sin remordimiento. Italia y España se miraban de reojo antes del comienzo del partido. Ambas selecciones sabían que un paso en falso te podía meter en la gloria de la final o mandarte al abismo de la eliminación.

Había cuentas pendientes entre los dos combinados. ‘Vendetta’ que diría un aficionado italiano; 'ajuste de cuentas' un aficionado español. Remontándonos a anteriores choques transcendentales entre ambas -en la final de la euro 2012-, España consiguió la victoria por 4-0 ante Italia. Un duro golpe al orgullo de la azzurra. Tanto es así que en la siguiente Euro, la del 2016, nos volvimos a cruzar, esta vez en octavos, con la victoria del combinado italiano, 2-0.

Pero tocaba verse las caras ahora, en esta Euro, en la de 2020 celebrándose en 2021 -cosas de la pandemia-. La posesión del balón durante todo el partido fue para la de siempre. Para España. Pero a estas alturas ya sabemos que no de la posesión vive el fútbol y sí de la eficacia, e Italia, en estos partidos, sabe moverse como pez en el agua. Chiesa abrió la lata. Morata forzó la prórroga. La misma historia de siempre. Sufrir hasta el final. O mejor dicho, hasta los penaltis.

Italia necesitó muy poco durante los 120 minutos para firmar el empate. Todo el peso del juego fue Español y el combinado azul se dedicó a esperar con la intención de jugar al contrataque. No es lo más vistoso pero a ellos les sirvió para conseguir el objetivo. Se hizo patente la venganza de la tanda de penaltis de 2008 donde la suerte cayó de cara de España en aquella ocasión. Los de Luis Enrique se despiden en las semis. La nota positiva es que ha nacido una estrella de la que el mundo fútbol habla, y se llama Pedri.

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