El 12 de octubre también es el día de los fascistas y seguidores de la dictadura franquista. Muchos de estos ultras necesitaban demostrar su fracasada ideología y que aún existían y para ello acudieron a la "Fiesta Nacional de España" a enseñar, orgullosos, las esvásticas tatuadas en su cuerpo. También estaban esos abuelitos nostálgicos con algún nieto luciendo la bandera franquista mientras paseando por las calles principales de Barcelona o como entretenimiento insultando al  presidente del Gobierno en Madrid.

Antes con brazo en Alto aplaudían el desfile de los golpistas del 36, ahora acuden a estos eventos con rabia y odio acumulado, entregados y derrotados porque ya no mandan en España. Pero aún quedan patriotas en extinción que gritan ¡Viva Franco!". 
Otos quedan en un lugar con su parafernalia nazi para dirigirse al desfile militar y gritar "¡Fuera, fuera, fuera! ¡Gobierno dimisión! ¡Sinvergüenzas, traidores!".

En la Barcelona republicana. 

En la plaza España de Barcelona, Democracia Nacional agitan sus banderas, lucen con orgullo enseñas franquistas.

Valencia también aparecen los ultras

Aquí es España 2000, la de José Luis Roberto, despliegan una bandera gigante de España. Además, sus miembros lucen camisetas con emblemas neonazis.

El líder de España 2000, José Luis Roberto,  es un conocido ultra en Valencia y su provincia, recientemente la Policía Nacional le entregó el pasado 4 de octubre una condecoración por su faceta en la empresa Levantina de Seguridad.

Y los ultracatólicos se unen a la fiesta.

 Y los tradicionalistas ultracatólicos no querían perderse la fiesta y también han aprovechado el 12 de octubre para exaltar la figura de Isabel la Católica en Madrid que acabó con vivas a Cristo Rey.  

Como ven amigos lectores, el 12 de octubre también se celebra el día de los que odian a los demás por pensar distinto, por su color de piel, por su orientación sexual o simple.