El caso de Mónica Oltra

Opinión19/06/2022 Redacción
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Cristina Seguí y José Luís Roberto, líderes de la ultra dercha

Es obvio y está claro que existe una cacería de la ultra derecha contra Mónica Oltra, igual que lo hicieron con Pablo Iglesias, Monedero, Erejon y otros muchos líderes y militantes de la izquierda, y no tengan ninguna duda que lo harán contra Oltra contra Yolanda Diaz.

Los facistas siempre utilizan el mismo juego sucio contra sus adversarios políticos, ellos actúan y sus tertulianos con los medios de comunicación ejecutan.

Nadie pone en duda que el marido de Mónica Oltra, abuso de una menor de 14 años, este canalla y miserable lo hizo constantemente, y está claro que el caso "Mónica Oltra" se aclarara y ella  tendrá que explicar como imputada al magistrado, ahora bien esto no significa que sea culpable, aunque algunos ya le han puesto su condena, especialmente este caso es confuso o controvertido y para su posible resolución hay un proceso judicial abierto que decidirá si Mónica Otra, oculto pruebas e informes cuando era consejera.

¿Es necesario esa investigación?. Por supuesto, sería inmoral que se paralice cualquier investigación y tampoco que se dificulte  la investigación de abuso a una menor.

La cacería facista contra Oltra

Todo los medios no oficialistas apuntan qu existe una caza de brujas y señalan a dos personas José Luís Roberto y Cristina Seguí, activistas muy conocidos en los círculos de la extrema derecha.

Habría que recordarles a los votantes de VOX quien son estos facistas.

José Luís Roberto, fue el fundador de la empresa Levantina de Seguridad, una empresa que contrataba a exmilitares, nazis, y ultraderechistas, ha sido presidente de una asociación de prostíbulos, también de un sindicato falangista conocido como las CONS, propietario del Pub Lili Marleen, Ubicado en la calle Salamanca, en una de las zonas de más marchas en la ciudad de Valencia.

VINCULACIÓN CON ORGANIZACIONES FACISTAS

Se le vincula con movimientos neofacistas como CONS, CEDADE, ESPAÑA 2000 y la antigua FN.

Además, Roberto controla un negocio que nutre a varias organizaciones facistas, y tiene por tanto a su alcance un cuerpo armado y adiestrado. Sus anuncios piden jóvenes entusiastas y prometen excelentes recompensas a cambio de un apoyo total en la empresa. Levantina de Seguridad, Lili Marlen, Intervalencia Radio y CONS, forman un cóctel explosivo en manos, únicamente, de José Luis Roberto.

Como podrán leer nuestros lectores a este personaje, portavoz de una asociación de prostíbulos  le importa muy poco  loa abusos sexuales a niñas y mujeres.

Y si hablamos de Cristina Seguí, otra fascista más, que ha llegado a difundir información pública de menores que habían denunciado una violación para que las acosaran.

Ahora reflexionen, a estos personajes ¿Realmente les mueve denunciar una injusticia o por el contrario solo les importa perjudicar a un adversario?

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