El PSOE apoya una iniciativa que acusa a Sánchez de actuar de forma unilateral con el Sahara en víspera de su viaje a Rabat

El Grupo Parlamentario Socialista avanzó este miércoles que apoyará en el Congreso de los Diputados una proposición no de ley en la que se acusa a “una parte del Gobierno” de modificar “unilateralmente su posición en relación con el conflicto del Sahara Occidental”, y lo hará en vísperas del viaje a Marruecos del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, para encontrarse con el rey Mohamed VI y abrir una nueva etapa de las relaciones con Rabat.

La proposición no de ley fue presentada por los grupos parlamentarios confederal de Unidas Podemos-En Comú Podem-Galicia en Común, ERC y Euskal Herria Bildu, y versa sobre “la posición del Gobierno español en relación con el conflicto del Sahara Occidental”.

En la citada iniciativa debatida en el Pleno, la exposición de motivos recoge que “una parte del Gobierno español ha modificado unilateralmente su posición en relación con el conflicto del Sahara Occidental”, en alusión a los socialistas, y los acusa de contravenir “las resoluciones de Naciones Unidas y el propio Derecho Internacional”, al adoptar “una nueva posición” favorable a la propuesta marroquí de 2007 de un régimen de autonomía para el Sahara.

Además, se subraya que la decisión fue tomada “sin haberla consultado ni compartido con ninguno de los grupos políticos del Congreso de los Diputados” y contraviniendo “el consenso mayoritario de la Cámara”. El texto abunda en la crítica y recalca que “una decisión de tal calado político no puede ser adoptada de espaldas a la voluntad mayoritaria” de las Cortes “y sin la transparencia esperable en decisiones de tal trascendencia política y social”.

El varapalo que asesta la iniciativa debatida y a la que, sin embargo, dará sus votos el Grupo Socialista, se dulcifica en la parte resolutiva, que insta a la Cámara Baja a “ratificar su apoyo a las resoluciones de la ONU y a la Misión de Naciones Unidas para el Referéndum en el Sahara Occidental” y defiende una solución articulada “conforme al Derecho Internacional”, una fórmula en la que el PSOE sí se encuentra cómodo, tal y como viene reiterando el ministro de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, José Manuel Albares, que subraya que la postura de España “está en el marco de Naciones Unidas, la Carta de Naciones Unidas y la resoluciones del Consejo de Seguridad”.

EL PAPEL DE PODEMOS

En la defensa de la iniciativa, por parte del grupo confederal de Unidas Podemos-En Comú Podem-Galicia en Común, el diputado Gerardo Pisarello equiparó la defensa de la libertad en Ucrania frente al autoritarismo de Putin y señaló que “nada, salvo un cálculo mezquino y miope” justificaría “que no se defienda con la misma convicción el derecho del pueblo saharaui a determinarse libremente” frente a “las pretensiones colonialistas de Mohamed VI”.

Pisarello consideró “perturbador” tener que hablar en la tribuna del Congreso “de una carta en la que el Gobierno dispensa el trato de aliado y gran amigo” a un monarca absoluto “que ha cercenado las libertades de miles de marroquíes” y “no ha dudado en arrasar con pueblos como el saharaui o el rifeño”. En su opinión, un gobierno progresista “no puede utilizar este lenguaje sin violentar a sus bases, a sus socios parlamentarios” y no puede hacerlo, recalcó “sin convertir la llamada real política en un triste ejercicio de cinismo”.

Para rematar su crítica abierta a la decisión del Ejecutivo, subrayó que “al colocarse de manera tan ostensible del lado del más fuerte, el Gobierno está perdiendo su credibilidad como mediador en el conflicto del Sahara”. Por eso, reclamó para terminar, “hace falta una rectificación que sólo puede consistir en retomar un compromiso claro con el mandato de Naciones Unidas sobre el Sahara Occidental que nunca debió haberse abandonado”.

Con la presencia en la tribuna de invitados del delegado del Frente Polisario para España, Abdulah Arabi, subió a la tribuna la diputada de ERC Marta Rosique, que identificó la lucha del independentismo catalán con la del Frente Polisario.

En opinión de Rosique si el Gobierno pensaba que “la guerra en Ucrania ocultaría su traición, se equivocaban”, ya que “han vulnerado el derecho a la autodeterminación” y con su cambio de postura “se han saltado a 74 resoluciones de las Naciones Unidas, ni más ni menos”. La diputada de ERC aseguró que apostar por la opción que propone Marruecos “es poner en duda la soberanía del Sahara Occidental y es poner en duda su descolonización” para avalar “que Marruecos imponga la fuerza” en un territorio que vive desde hace un año bajo una situación bélica.

Para Marta Rosique, “la situación actual del Sahara y de los últimos 46 años es culpa del Estado español”, ya que el pueblo saharaui “ha perdido el respaldo de su potencia administradora”, Por ello, afirmó dirigiéndose al PSOE, “no vamos a parar hasta conseguir que vuelvan a su posición anterior, con el derecho a la autodeterminación de todo un pueblo no se juega”.

Por el grupo parlamentario Euskal Herria Bildu, Jon Iñarritu calificó “el cambio de postura unilateral que tomó el Gobierno el pasado día 14 de marzo” como “algo más que un error”, ya que, en su opinión, “fue una injusticia contra el pueblo saharaui, además de una chapuza en términos diplomáticos y políticos”.

El diputado de EH Bildu consideró que el PSOE tiene “una oportunidad de rectificar y volver a la postura histórica de España de respeto al derecho internacional, al legítimo derecho del pueblo saharaui a su libre autodeterminación”, y de esta forma “si esta cámara envía un mensaje claro, ese va a ser el mensaje con el que el presidente del Gobierno” viajará a Rabat.

EMIENDS DEL PNV

El diputado del PNV Aitor Esteban abrió su intervención con un lacónico “constato que el Gobierno está ausente”, por lo que, dijo deducir “que va a hacer lo que le dé la gana, le diga el Parlamento lo que le diga, se argumente lo que sea”.

“Lo único que conocemos es el compromiso español a través de la de la carta”, afirmó Esteban, que acuso al Ejecutivo de abandonar “su posición de neutralidad y de responsabilidad como antigua potencia colonizadora” para situarse “a favor de una de las partes de ese contencioso”.

Para Esteban, que defendía una enmienda de su grupo a la PNL, argumentó que la iniciativa presentada a debate lo que conseguiría “es una unanimidad probablemente en esta Cámara a favor y no vamos a aclarar nada”, mientras “el Gobierno y otros grupos parlamentarios van a seguir muy cómodos· porque no se verán afectados “por el hecho de decir que se apoya la visión de Naciones Unidas y el diálogo”.

En opinión del diputado jeltzale, además de hablar claro los grupos, es necesaria “también una votación, por eso les ofrecemos esta posibilidad de enmienda”, ya que “sería muchísimo más clarificador”.

Por parte de Ciudadanos, que presentó también una enmienda, el diputado Miguel Ángel Gutiérrez consideró que el texto propositivo de la PNL “no cambia nada”, y aunque su grupo se mostró “a favor, por supuesto, del pueblo saharaui, dentro de lo que Naciones Unidas y la negociación de Naciones Unidas pues sea capaz de conseguir en esa negociación”, dejando claro que Cs no quiere “que se cambie el criterio que se ha venido manteniendo hasta ahora y con el que el Estado español ha estado siempre”, pero afirmó que los ponentes de la iniciativa “se equivocan tremendamente”. La razón, explicó, es que en su opinión, el texto a debate “no va ni siquiera los derechos del pueblo saharaui”, sino de “hablar de autodeterminación” por parte de “aquellos partidos políticos que siguen pensando que la autodeterminación es una posibilidad dentro del Estado español”.

En caso de no aceptarse su enmienda, avanzó Gutiérrez, “no vamos a votar a favor de esto”, ya que permite que “los albaceas de ETA sigan defendiendo y apoyando grupos terroristas como el del Frente Polisario”, algo que “este hemiciclo no debe tolerar. El Frente Polisario “es un grupo terrorista que han asesinado a 289 españoles”, aunque, dijo señalando a EH Bildu, “igual ustedes con los casi 1.000 de ETA les parecen pocos”.

ADVERTENCIA AL PSOE

Ana Oramas, de Coalición Canaria, advirtió al grupo socialista y les instó a tener “cuidado con votar a favor de la iniciativa, no sea que mañana se les acabe la cena del Ramadán” porque, subrayó, “por mucho que digan que siguen manteniendo la misma posición”, lo que han dicho al gobierno de Marruecos “es la prueba” del cambio de rumbo.

La diputada canaria dijo que “ahora entendemos los nacionalistas canarios la razón de que cuando el Parlamento marroquí en el 2019 aprobó dos leyes donde se apropiaban del agua del Sahara y entraba conflicto con las aguas españolas y Canarias”, la decisión de Rabat “no se recurrió por parte de España, ni se denunció a Naciones Unidas”. En la misma línea, señaló, “lo más gordo es que hace un mes, cuando los nacionalistas canarios denunciaron por escrito al Gobierno que la FAO había reconocido parte de las aguas españolas canarias”, lo que provocó una confusión en “muchos atuneros de las islas”, lo que dijo el Gobierno es “que no que era un asunto relevante”.

El diputado de la CUP Albert Botran tachó de “traición” al pueblo saharaui la nueva postura de España, y “un reconocimiento de la ocupación marroquí”, que supone una “irresponsabilidad del Estado español como potencia administradora”. Por ello mostró su apoyo a la proposición no de ley para “volver al derecho a la autodeterminación y a los compromisos con el pueblo saharaui y que este sea el camino de un Sahara libre”.