Médico, enfermeros y auxiliares lo dieron todo para que sus pacientes pudieran darse la diálisis

Era sábado y tercer día consecutivo de fuertes nevadas provocada por la borrasca Filomena, en una clínica privada de diálisis en la ciudad de Albacete, se esperaban a 120 pacientes para darse su sesión de hemodialisis, pero la situación generada por el temporal de frío y nieve provocaba que se cortaran carreteras en toda la provincia, esto dificultaba que numerosos pacientes afectados de insuficiencia renal crónica que viven en estos municipios no llegarán a tiempo para su tratamiento poniendo en riesgo sus vidas.

COORDINACION, EFICACIA Y TRABAJO EN EQUIPO

Sin superiores que les diera las instrucciones necesarias para actuar frente a la situación que se les presentaba, ellos mismos hicieron de supervisores y coordinadores, mientras el doctor con el teléfono en mano llamaba a familiares, pacientes y transporte sanitario para coordinar las llegadas al centro, el personal sanitario trabajaba a tope para que sus pacientes pudieran darse la diálisis.

La eficacia y el trabajo en equipo salvo la complicada situación, el gran trabajo que hicieron  estos sanitarios y que muchos no supimos o no sabemos valorar.

A veces deberíamos ponernos en su piel, ellos también tienen  vidas y problemas como cualquier persona, si hace frío, calor o es festivo tienen que ir a trabajar para que  a sus pacientes no les falte la sesión de diálisis, incluso doblando turnos si es necesario, trabajo que nunca está lo suficientemente bien pagado.

Ellos una vez más lo han dado todo sin importarles que se lo agradezcan, mientras sus superiores estaban en sus casas, este equipo de profesionales estuvieron al pie del cañón, en primera línea cuidando a sus pacientes, luego llegarán otros poniéndose las medallas y llevándose todos los méritos, pero a ete médico, enfemer@s y auxiliares no les importa por que sus pacientes no son números, son personas.